La incubación del neoliberalismo que permanecerá en la democracia capitalista, surge con la crisis del modelo keynesiano que sustentaba al Estado de bienestar. La ideología neoliberal aprovechará dicha crisis para generar la sensación de la necesidad de un nuevo modelo, pero que a la vez incluye una postura ideológica fundamentalista basada en un neoconservadurismo y una profunda convicción antimarxista.