«piden a Irán y a sus aliados que se abstengan de realizar ataques que puedan agravar aún más las tensiones regionales y poner en peligro la oportunidad de acordar un alto el fuego y la liberación de los rehenes. Serán responsables de las acciones que pongan en peligro esta oportunidad de paz y estabilidad. Ningún país o nación saldrá ganando de una nueva escalada en Oriente Medio».