Sabíamos todos que el 10 de enero sería el Día más Largo del Siglo, el Fin de los Tiempos, el Apocalipsis Now, el momento en que la oposición se dejaría de postergaciones y tomaría por fin el poder que durante veinte años no había conquistado por no pecar de apresurada.
Basándose en las Profecías de Nostradamus, el horóscopo y la oración del tabaco, el secretario general de la OEA predice el aislamiento diplomático total de Venezuela, sólo para fracasar en la ONU, no poder lograrlo en la propia OEA y confiar la tarea a los trece miembros del Grupo de Lima, de los cuales cinco se retractan de su declaración contra la Patria de Bolívar antes de que Maduro tome posesión de su cargo ante delegaciones de 140 países.