Rebelión en la Granja
Recordando la novela de George Orwell que le da título a este artículo, pareciera que las medidas implementadas por Trump en su “patio trasero” han ido tan lejos que han generado una “rebelión en la granja” en la que los animales se pelean para obtener lo que creen es un mejor gobierno que no se diferencia mucho del que existe. Como en la obra, la corrupción, los intereses mezquinos y la búsqueda de beneficios de grupos y facciones están concurriendo para la construcción de una nueva forma de poder y dominación que podría ser peor que la que le antecede.
Neolengua [Fragmento de la novela «1984» de George Orwell]
Si no quieren decir capitalismo, dirán economía de mercado; si no quieren decir países pobres, dirán países en vías de desarrollo; las personas pobres serán personas de pocos recursos; al despido libre sin indemnización ni explicación lo van a llamar flexibilización del mercado laboral; a los trabajos de mierda, minijobs; al despido masivo, expediente de regulación de empleo; a la emigración forzada por las condiciones penosas de tu país, movilidad exterior; a la recesión lo llamarán crecimiento negativo; al rescate bancario, préstamo con condiciones muy favorables para sanear balances sin coste alguno para el contribuyente; bajar los sueldos pasará a ser moderación salarial.
“Quien controla el pasado, controla el futuro, quien controla el presente controla el pasado”
La novela de George Orwell, 1984, fue escrita como una utopía, una concepción de un mundo ideal desarrollado por el autor. Además de ser distópica, es decir, un tipo de mundo malo, indeseable en sí mismo, fue un adelanto para nuestros tiempos. El lema del Gran Hermano fue, “Quien controla el pasado controla el futuro, quien controla el presente controla el pasado” y era lo que se describía manipulando la prensa, la literatura y fundamentalmente los medios de comunicación. La época actual superó con creces toda la imaginación de Orwell.
¿ Por qué Lenín Moreno entrego a Julián Assange ? ¿Qué hay detrás de todo ?
«En tiempo de engaño universal, decir la verdad se convierte en un acto revolucionario» [George Orwell]
Yo te entrego información confidencial de las grandes empresas gratuitamente , y soy terrorista… [Julian Assange – Wikileaks]
Yo entrego tu información confidencial a las grandes empresas, cobrando, y soy elñhombre del año [Mark Zuckeberg – Facebook]
La habitación 101
La habitación 101 es una de las más siniestras metáforas empleadas en 1984, la última y más poderosa de sus novelas. Designa una dependencia del Ministerio del Amor (el que se ocupa de corregir la disidencia mediante la tortura) en la que se oculta «lo peor del mundo». En la 101 el prisionero se enfrenta a lo que más teme, a su peor fantasía, a aquello ante lo que su espíritu se quebrará definitivamente. En el caso de Winston Smith, protagonista de la novela, lo peor del mundo son las ratas.
«Vivimos como en la novela ‘1984’ de Orwell»
La exfuncionaria del servicio de inteligencia británica MI5, Annie Machon, va incluso más allá y alerta de que los dispositivos inteligentes dentro de nuestras casas, como refrigeradores o televisores inteligentes, ya han sido ‘hackeados’ y los utilizan para espiarnos. «Estamos viendo la novela ‘1984’ de George Orwell, en la que las pantallas en nuestros pisos pueden observarnos», advierte.
Amazon Kindle y la ironía de borrar los libros “1984” y “Rebelión en la granja” de George Orwell
Buscando materiales, hemos encontrado estos artículos del 2009 denunciando la acción de Amazon Kindle de borrar dos libros emblemáticos, “1984” y “Rebelión en la granja” de George Orwell. Ambos libro ya habían sido comprados por muchos lectores y usuarios de Kindle. Es cierto que recibieron el dinero de regreso, pero el sólo hecho de saber que lo hicieron, nos hace que se prendan todas las alarmas en nuestro cerebro. ¿Estamos al borde de «Farenheit 451»?
La vuelta de Orwell y el Gran Hermano a la guerra en Palestina, Ucrania y contra la verdad
Cuando las sociedades avanzadas se despolitizan, los cambios se producen de forma tan sutil como espectacular. En el discurso del día a día, el lenguaje político está invertido, tal y como Orwell profetizó en 1984. «La democracia» es ahora un artefacto retórico. La paz es una «guerra perpetua». «Global» significa imperial. El concepto de «reforma», que una vez resultó esperanzador, hoy equivale a regresión e incluso destrucción. «Austeridad» es la imposición del capitalismo extremo a los pobres y la concesión del socialismo a los ricos: un sistema bajo el cual la mayoría está al servicio de las deudas de unos pocos.