Las dictaduras no se instalan de un día para otro. El autoritarismo se va imponiendo poco a poco en democracia con acciones como las que hemos visto hoy por televisión. El asalto policial con armas de guerra a la sede de Comunes, ordenado por el fiscal nacional Abott y trasmitido en vivo por un noticiero es absolutamente inaceptable en una democracia, a dos días de elecciones parlamentarias y presidenciales. Esta acción de fuerza desproporcionada es también una forma de intervencionismo electoral inadmisible.