El gobierno de Macri, a través de Cambiemos, aplica un nuevo entendimiento del mundo, que va más allá de la ideología. Trata de instalar una creencia que justifique –apelando a fantasmas del “pasado”–, la demolición de una razón socialmente aceptada. Estamos en presencia de un ataque frontal en contra de una concepción ordenadora del contexto socioeconómico y sus principios relacionados con la igualdad de oportunidades, distribución equitativa de los recursos y respeto a los Derechos Humanos. Se trata de la afirmación de un tipo de individualismo en contra del colectivismo, ahora llamado “populismo”.