“El ocultamiento del Informe de Gasto Tributario de 2005 por parte de la dirección del servicio, constituye un hecho de la máxima gravedad. Deja en claro que se sustrajo información del debate público justo en el momento en que era más necesaria, en función de validar una postura absolutamente subordinada a los designios del Gobierno de turno”, dice Insunza. “Eso no corresponde a un servicio de carácter autónomo y técnico, ni responde a su tradición histórica”.