Una de las últimas querellas presentadas por el Servicio de Impuestos Internos se dirigió contra Cristian Warner, la mano derecha de Marco Enríquez-Ominami. En el escrito se informa que sólo se cobrará una multa a las empresas acusadas de pagar facturas falsas para allegar recursos a la campaña presidencial 2013 del líder del PRO. Esa decisión bloquea la investigación de la Fiscalía a la Constructora OAS –parte del escándalo de corrupción “Operación Lava Jato” en Brasil– y a Cencosud. Beneficia también a la familia Ossandón Larraín, implicada en el mayor fraude tributario de la historia.