Los halcones libérales y los neoconservadores no han logrado provocar el enfrentamiento con Rusia, conflicto para el cual se entrenaron en tiempos de la guerra fría. Prevaleció la voz de la razón. Mientras se negocia discretamente una salida para la crisis ucraniana, Rusia y China se disponen a convencer a Estados Unidos y sus aliados de que deben participar en una alianza global contra el terrorismo islámico. Después de 5 años de tensión, la «primavera árabe» –proyecto de conquista del poder por la Hermandad Musulmana y de proclamación de un califato– está fracasando. Se ha salvado la paz.