Recuerdo bien ese encuentro de hace un tiempo. Hablo de un lugar y del personaje. En la región central de Chile existe la comuna de Las Cabras, de fértiles campos. En esa franja territorial y a orillas de camino un aviso llama la atención. Campo puro, en sazón multitud de frutos a la vista, sol y cielo azul en plena estación estival, parcela libre de alambradas y barreras y, pronto su majestad el hombre de la tierra, el Tío Paciencia.