Iquique, Plaza Manuel Montt: a la hora señalada

21 de diciembre de 1907
Es posible que haya bajado desde la pampa, junto a otros miles, cifrando las  esperanzas que en el puerto sí escucharían sus demandas, siendo “tan poco lo pedido”, no había para qué pensar en tragedias, sino más bien en regresar pronto al campamento, a  seguir golpeando la dura veta del caliche, generoso y rentable para unos, esquivo y miserable para otros, para los más, por supuesto…