De la democracia representativa a la democracia directa

La democracia directa es la verdadera democracia. Su esencia misma. Su espíritu. Si en el pasado no pudo hacerse efectiva y debió trocarse en representativa fue porque no existían los avances que la sociedad de hoy brinda para ejercerla. Fue una aspiración. Recuperarla es volver a imponer el control colectivo sobre la marcha de la misma sociedad.