viernes, 1 de abril de 2016
La hegemonía en las calles brasileñas pertenece hoy a la derecha, por primera vez en 50 años. Poco antes del golpe de Estado de marzo de 1964, la derecha protagonizaba grandes manifestaciones contra el presidente progresista João Goulart, como la Marcha de la Familia con Dios por la Libertad en São Paulo, que congregó a cerca de 300 mil personas (http://goo.gl/J3wE1).
Bajo la dictadura la izquierda ganó las calles. A contrapelo, impuso modos de protesta, símbolos y discursos que sentaron su hegemonía hasta el 20 de junio de 2013. Ese día comenzó la llamada Revuelta de los Coxinhas (término peyorativo para referirse a varones blancos de clase media alta, engreídos, pitucos en lenguaje rioplatense).
Lo que sucedió aquella noche en las principales ciudades del país aún no ha sido dilucidado, pero lo cierto es que aprovechando manifestaciones masivas del Movimento Passe Livre (MPL) contra el aumento de las tarifas del transporte urbano, decenas de miles de coxinhas con la bandera de Brasil y los colores verdeamarelo desembarcaron en las marchas, agredieron y expulsaron a quienes portaban símbolos de izquierda y tomaron el control de las manifestaciones.
No es la simple reproducción de la vieja derecha católica y militarista que apoyó el golpe de 1964. Es una nueva derecha: sin partido, de clase media alta (con ingresos de más de cinco salarios mínimos), apoyada por empresarios industriales mientras el agrobusiness está en el gobierno; que acepta el aborto, el matrimonio igualitario, la despenalización de la mariguana y la gratuidad de los servicios públicos (http://goo.gl/AMSH3n). Pero se opone a las cuotas para estudiantes negros en las universidades y cree que Bolsa Familia la perjudica.
Es un error pensar que actúan digitados por los medios, como si fueran autómatas. Lo que no quiere decir que los medios estén al margen de la actual coyuntura brasileña. Es una derecha militante, que tiene estrategia y organizaciones propias, laica, politizada, formada en universidades privadas y públicas.
La primera acción de calle fue convocada por el Movimiento Cívico por el Derecho de los Brasileños, más conocido como Cansei (me cansé), el 17 de agosto de 2007, a la que asistieron 5 mil personas cuando aún latía el mensalão, el primer escándalo de corrupción que sacudió al gobierno del PT desde 2005. Las crónicas de prensa ironizaban sobre las marcas exclusivas de ropa que lucían los manifestantes, quienes fueron rechazados por los más importantes dirigentes del socialdemócrata PSDB, entre ellos el ex presidente Fernando Henrique Cardoso (http://goo.gl/pBvtHR).
Pese a la fugacidad del movimiento, nació un patrón de acción que luego se repite: gritos de fuera Lula, participación de actrices y actores populares de telenovelas, apoyo de la Federación de Industrias de São Paulo (FIESP) y de la Orden de Abogados de Brasil (OAB), y expulsión de personas que portaban banderas del PSDB porque se definen como anti-partidos.
Pero lo decisivo fue lo sucedido entre 2007 y 2013, aunque es poco atendido por los medios y los analistas. La nueva derecha creció en los centros de estudiantes de universidades públicas que eran bastiones de la izquierda. El caso más significativo sucedió en la Universidad Nacional de Brasilia (UNB).
En 2009 se creó el grupo Alianza por la Libertad, autodefinido como liberal, que ganó la dirección del centro de estudiantes en 2011 con 22 por ciento de los votos, ante la fragmentación de las izquierdas. Fue relegida por cuarta vez en 2015, con 60 por ciento de los votos, desplazando a las agrupaciones del movimiento estudiantil. La UNB había protagonizado luchas muy importantes como la ocupación de la rectoría en 2008, exigiendo la renuncia del rector denunciado por corrupción.
Alianza por la Libertad, vinculada al grupo Estudiantes por la Libertad (financiado por fundaciones neoliberales y anticomunistas de Estados Unidos) y al Instituto Liberal, se concentró en temas cotidianos de los estudiantes, como la limpieza de los baños y la seguridad en el campus. Mientras el movimiento estudiantil planteaba sus demandas en términos generales, la derecha buscaba soluciones concretas muy elementales. Sus principales apoyos estaban en las facultades de ingeniería, derecho y economía.
En esos años la derecha ganó otras universidades estatales como Minas Gerais y Rio Grande do Sul, y creció en otras, siempre rechazando la política partidaria, acusando a los militantes de izquierda de buscar cargos de confianza. Sus cuadros se formaban en institutos y organizaban agrupaciones de nuevo tipo.
En paralelo, se expandieron las marchas contra la corrupción. En 2011 hubo marchas en 25 ciudades, siendo la de Brasilia la más numerosa con 20 mil personas con el apoyo de la OAB. Los manifestantes llevaban banderas brasileñas y cantaron el himno nacional, lo que indica que un movimiento legítimo fue cooptado por la derecha más militante (http://goo.gl/CtLMyI).
La hipótesis es que antes de la explosión de junio de 2013 la nueva derecha ya era una fuerza social y tenía experiencia en la conducción de masas, justo cuando la militancia de izquierda abandonaba la calle y se volcaba hacia el Estado. La nueva derecha creó una cultura de protesta en la calle, lo que le permitió reconducir las marchas hacia sus objetivos. Sobre la base de esas experiencias, en 2014 nacen los grupos que hoy convocan millones: Movimento Brasil Livre, Vem Pra Rua y Revoltados On Line.
¿Por qué las izquierdas no han sido capaces de entender este avance de una nueva derecha y todo lo atribuyen a los medios? Una respuesta, provisoria, es que no se comprende la realidad desde las instituciones sino desde la calle. La página passapalavra.info fue la primera en advertir lo que se venía, la misma noche del 20 de junio, al igual que ex miembros del MPL, como el antropólogo Paíque Duques Santarém y el filósofo Pablo Ortellado. Esta nueva derecha no puede combatirse con argumentos ideológicos, sino en la disputa viva de la vida cotidiana.
*Fuente: La Jornada
Artículos Relacionados
Volkswagen, la punta del iceberg
por Rafael Hernández Bolívar (Rebelión)
9 años atrás 5 min lectura
Perú: Un mendigo sentado en un banco de cobre, oro y gas
por Jorge Manco Zaconetti (Perú)
5 años atrás 10 min lectura
Codelco anuncia el mayor saqueo de su historia
por Julián Alcayaga O. (Chile)
8 años atrás 4 min lectura
Mutaciones del capitalismo en la etapa neoliberal (Parte I): Economías centrales
por Claudio Katz (ArgenPress)
10 años atrás 45 min lectura
Chile: La privatización de la política
por Juan Pablo Cárdenas S. (Chile)
11 años atrás 7 min lectura
2 Comentarios
Deja una respuesta Cancelar la respuesta
Lo siento, debes estar conectado para publicar un comentario.
La «paciencia estratégica» de Irán se eleva a disuasión seria
por Pepe Escobar (Desde Moscú)
2 horas atrás
Los ataques de represalia de Irán contra Israel no se llevaron a cabo en solitario. Los socios estratégicos Rusia y China cubren las espaldas de Teherán, y su papel en el conflicto de Asia Occidental no hará sino crecer si EEUU no mantiene a Israel a raya.
Consejo de Seguridad: Estados Unidos veta resolución que recomienda a Palestina como Estado Miembro de Naciones Unidas
por Nicolás Boeglin (Costa Rica)
5 horas atrás
El veto de Estados Unidos este 18 de abril del 2024 será probablemente recordado como un grave error de apreciación del aparato diplomático norteamericano.
Su incondicional apoyo a Israel en Gaza desde la tarde/noche del 7 de octubre, hace que Estados Unidos haya socavado gran parte de su credibilidad en diversas latitudes del mundo.
La «paciencia estratégica» de Irán se eleva a disuasión seria
por Pepe Escobar (Desde Moscú)
2 horas atrás
Los ataques de represalia de Irán contra Israel no se llevaron a cabo en solitario. Los socios estratégicos Rusia y China cubren las espaldas de Teherán, y su papel en el conflicto de Asia Occidental no hará sino crecer si EEUU no mantiene a Israel a raya.
A los saharauis: «Para ganar batallas, es importante practicar activamente los valores de la solidaridad, el compromiso, la disciplina y la lucha»
por Luis Portillo Pasqual del Riquelme (España)
1 día atrás
«Creo que el FP debería plantearse estas cuestiones, ocuparse mejor de encuadrar a su gente, enseñarles a trabajar en la clandestinidad, mejorar la organización para no hacer –como hoy- el ridículo ante el enemigo.»
La clase media emergente que viene del mundo obrero, tiene nuevas expectativas y ambiciones, que cambian los resultados de cualquier elección. Y sus ambiciones son más bien materiales e individualistas, y no tienen ganas de compartir lo logrado con los que se quedaron abajo. Y en este sentir influyen los medios de comunicación que crean ambientes y sentires que no favorecen a las posturas de compromiso social ni a las utopías, sino a la complacencia de corto plazo de todos los deseos. Ahí es donde entra el papel de los medios de comunicación con su infinita oferta de mundos de fantasía en forma bastante abierta.
Por ejemplo el Google ofrece youtube temáticos en las áreas que uno frecuenta, pero además ofrece pornografía, así como a la descuidada. También en periódicos digitales serios se infiltran o son parte de los patrocinadores espacios que ofrecen cosas faranduleras que rayan en la pornografía. Me imagino que si por casualidad uno abre un espacio de esos, te invaden el computador. Y si eres un chico o chica adolescente, puedes quedarte pegado en el tema.
Hola!
Leo hacia el final:
– “¿Por qué las izquierdas no han sido capaces de entender
este avance de una nueva derecha y todo lo atribuyen a los medios?”-
……………………
El bueno de Raúl Zibechi ensaya la misma respuesta de Michel Moore en otro Post de piensaChile: “La Corporación”: “dejar el sillón y salir a la calle”.
……………
Ok! Sin embargo no veo que estos hermeneutas de la vida social atiendan seriamente la bisagra sobre la que toda sociedad hace sus pliegues y des-pliegues: LAS GENERACIONES.
……………
Mensaje del expresidente Lula al pueblo brasileño sobre la situación en el país
http://www.nodal.am/2016/04/expresidente-lula-da-silva-le-habla-a-manifestantes-adherentes-a-dilma-rousseff/
NOTA: “nodal” (NOTICIAS DE AMÉRICA LATINA Y EL CARIBE) es creado y dirigido por un muy buen periodista: Pedro Brieger.