El enemigo interior. El terrorismo no se justifica con nada, pero se explica con todo
El mayor peligro que amenaza Occidente se encuentra en Occidente mismo: bastaría con recordar que si la democracia, la lucha por las libertades individuales y por los Derechos Humanos son bien occidentales, no menos occidentales son la censura, la persecución, la tortura, los campos de concentración, la caza de brujas, la colonización por la fuerza de las armas o del capital, el racismo, etc.
Contra el prejuicio, el odio y la ignorancia
“El primer gran foco de cultura de la Edad Media occidental es Toledo. La historia se repite: en el siglo XII, lo que Toledo fue para el mundo cristiano, lo fue Bagdad para el mundo musulmán (…). Es suficiente recordar que es Toledo donde Avicena fue traducido al latín, esto es, por un pequeño grupo compuesto, como mínimo, por Ibn Daud, judío arabófogo, que aseguraba la traducción del árabe al castellano; y Domingo Gundisalvo, cristiano, que aseguraba la traducción del castellano al latín (…). En realidad, si en el siglo XIII hubo una filosofía y una teología llamadas ‘escolásticas’, es ante todo porque Avicena fue leído y explotado desde finales del siglo XII. Es Avicena, no Aristóteles, quien inició a Occidente en la filosofía.”