Los médicos cubanos están allí insuflando vida
por Wilkie Delgado Correa (Adital)
9 años atrás 4 min lectura
Los parajes más recónditos e inhóspitos, esos conocidos con razón como sitios donde el diablo dio las tres voces, han sido palmos de tierra donde los médicos cubanos han sembrado amor, calmado dolores e insuflado vida.
La respuesta cubana contra el ébola como parte de la estrategia internacional contra la epidemia en Äfrica ha llamado la atención y ha concitado la admiración de los organismos internacionales competentes como la ONU y la OMS, de gobiernos de países ricos y pobres y de medios noticiosos diversos, entre los que destacan The New York Times y la revista Time. Tal parece que esta vez algunos en este mundo han despertado de una ancestral modorra o se han visto obligados a reconocer ahora algo que se había ocultado, se había soslayado o no se quiso ver ni decir durante más de cincuenta años. Porque es manifiesto que lo que hoy Cuba hace con una naturalidad generosa es consecuente con lo que ha venido haciendo durante ese largo lapso. Se trata de una política trazada desde el triunfo de la revolución cubana y una siembra de los valores humanos inherentes para tan noble misión en todos los ciudadanos cubanos y, en especial, en el personal de la salud.
El hombre nuevo del siglo XXI que fuera anunciado por el Che Guevara como fruto del difícil proceso de construcción de una nueva sociedad socialista iniciada en los decenios finales del siglo XX, a pesar de todas las contradicciones y los escollos inimaginables, se ha convertido en realidad en una forma especial como nunca lo pensaron o imaginaron los descreídos y los desmoralizadores sietemesinos.
Los contingentes médicos que han nutrido las misiones de colaboración de salud de Cuba en otros países poseen un extraordinario expediente de vidas salvadas y situaciones de salud mejoradas que merece un reconocimiento mundial por su excepcionalidad. El personal involucrado en acciones contra el ébola en Sierra Leona, Liberia y Guinea Conakri, unos 256 profesionales especializados, es apenas una pequeña parte de las 32 brigadas médicas en Africa, con 4 048 trabajadores, que son parte integrante de los 50 000 trabajadores que en la actualidad desempeñan acciones integrales de salud en 66 países. Por otra parte, la disposición de más de quince mil voluntarios en las filas del personal de la salud cubano para cumplir misión contra el ébola es reflejo de la existencia de una conciencia solidaria internacionalista que no se conoce en otras partes. Así que se puede afirmar que los médicos cubanos han realizado una hazaña humanitaria en todos los confines y desde ese punto de vista hay motivo para el asombro. Y como ha expresado un colaborador cubano en Liberia, las nuevas generaciones tienen un papel trascendente en este instante de la historia, pues «ahora llegó el momento de nuestra generación de ayudar al pueblo africano a combatir al ébola. Es nuestro Moncada, es nuestra Sierra Maestra…”
Donde quiera que el sufrimiento humano ha dejado escuchar su solicitud de socorro, allí han ido o están los colaboradores de la salud. Los parajes más recónditos e inhóspitos, esos conocidos con razón como sitios donde el diablo dio las tres voces, han sido palmos de tierra donde los médicos cubanos han sembrado amor, calmado dolores e insuflado vida. Son esos lugares donde el diablo del colonialismo se cebó durante centurias y puso sus botas e impuso su voz para mejor esclavizar a los nativos de las tierras «descubiertas” y conquistadas a sangre y fuego. Esos donde el diablo devenido en capitalismo e imperialismo se nutrió con la explotación de la fuerza de trabajo mediante el capital y alzó su voz trepidante de trompetas y medios tecnólogicos para hechizar y engañar en tiempos más modernos, aunque muchas veces –demasiadas– también puso sus botas sobre el escuálido esqueleto de los pueblos. Esos sitios donde el diablo de la pobreza, la ignorancia, el hambre, la insalubridad, alza también la voz propia, esa tercera voz de los sufridos y desesperados del infierno, que emana como grito y reclamo de su condición de pueblo explotado, desvalido y subdesarrollado.
En estos tiempos en que imperan en muchos escenarios nacionales e internaciones un clima de guerra y terror, de estallidos y silencios que cobran vidas de culpables e inocentes, alienta y provoca fundada esperanza, la solidaridad compartida, hombro a hombro, de hombres y mujeres abnegados de países de variados signos políticos e ideológicos, que en esta lucha contra el ébola están hermanados en acciones para derrotar a la epidemia en su lugar de origen.
Ojalá esta sea una experiencia singular para aprobar en el seno de las Naciones Unidas un proyecto encaminado a luchar contra la epidemia política del terror –venga de donde venga, incluso del quinto infierno– y lograr que su derrota instaure la soñada paz de la especie humana.
*Fuente: Adital
Artículos Relacionados
Bolivia: Sayaris y Walipinis, las huertas bajo la tierra del Altiplano
por Deutsche Welle
3 años atrás 1 min lectura
Desde el desierto de Texas, los multimillonarios gringos viajan al espacio, mientras abajo los migrantes mueren de sed y hambre tratando de cruzar la frontera
por Amy Goodman y Denis Moynihan (EE.UU.)
3 años atrás 6 min lectura
Valparaíso: Procesamiento inédito por lanzamiento de víctimas al mar en dictadura
por Francisca Palma (Chile)
6 años atrás 10 min lectura
Incendios: se agotó el “modelo” forestal neoliberal
por Oficina de Prensa Parlamentaria del senador Alejandro Navarro (Chile)
7 años atrás 6 min lectura
Las consecuencias bioéticas del plan “Paso a Paso”
por Álvaro Muñoz Ferrer (Chile)
4 años atrás 4 min lectura
En la vía rápida hacia la autodestrucción, ¿existe aún la posibilidad de un futuro viable para el Estado de Israel?
por David Shulman (EE.UU.)
2 horas atrás
Si Israel quiere sobrevivir, física y espiritualmente, necesita sufrir colectivamente un cambio radical en su visión de la realidad y enfrentarse a algunos hechos desagradables, aunque obvios.
25 de abril de 1975: La revolución de los claveles
por piensaChile
3 horas atrás
Se ha dicho que las revoluciones tardías son las más radicales. Seis años después del Mayo del 68 francés, pero cuatro años antes de que se pusiera en marcha una movilización de masas en el Estado español, la Revolución de los Claveles desplazó a un régimen dictatorial que llevaba casi medio siglo en el poder.
En la vía rápida hacia la autodestrucción, ¿existe aún la posibilidad de un futuro viable para el Estado de Israel?
por David Shulman (EE.UU.)
2 horas atrás
Si Israel quiere sobrevivir, física y espiritualmente, necesita sufrir colectivamente un cambio radical en su visión de la realidad y enfrentarse a algunos hechos desagradables, aunque obvios.
La «paciencia estratégica» de Irán se eleva a disuasión seria
por Pepe Escobar (Desde Moscú)
5 días atrás
Los ataques de represalia de Irán contra Israel no se llevaron a cabo en solitario. Los socios estratégicos Rusia y China cubren las espaldas de Teherán, y su papel en el conflicto de Asia Occidental no hará sino crecer si EEUU no mantiene a Israel a raya.