«La lucha no será en el parlamento. Es en la calle, en la conciencia, en la trinchera de ideas, en la organización popular para resistir la megaminería, en la tierra y en las rutas. Ahora bien, no es lo mismo que esas luchas se den con diputados del pueblo que sin ellos. En la Unidad Popular (UP) tenemos la convicción de que la lucha será por abajo. Así y todo, consideramos que es inteligente utilizar todos los intersticios de la institucionalidad con el fin de facilitar mejores contextos para combatir.»