Científicos rusos solicitan que se imponga una moratoria a los organismos genéticamente modificados (OGM) durante 10 años, tiempo durante el que pretenden estudiar su impacto sobre la salud humana. «Es preciso prohibir los OGM en el país e imponer una moratoria de 10 años. Durante este tiempo, mientras los OGM estén prohibidos, se pueden planear experimentos, pruebas, y pueden introducirse nuevos métodos de investigación», dijo en una entrevista a la agencia rusa Interfax, Irina Ermakova, vicepresidenta de la Asociación nacional de seguridad genética.