La Corte Internacional de Justicia mediante opinión consultiva reconoció a Sahara Occidental como un territorio sujeto de descolonización y el derecho de sus habitantes a la autodeterminación. La cuestión de Sahara Occidental ha sido objeto de un conflicto armado, de un cese al fuego vigente (1991) y de una misión de la ONU de monitoreo del cese al fuego y que prepara la realización de un referéndum de autodeterminación, el cual no ha ocurrido.