Partimos por lamentar la decisión que recientemente tomaste, pero la entendemos y vemos que detrás de ella has tenido potentes razones. Tú salida es para nosotros una pésima señal y la confirmación de que en este gobierno no tendremos una nueva y buena ley migratoria para Chile, a pesar de que fue un compromiso y que trabajamos con otras instituciones hermanas de manera tan ardua para generar una propuesta que hoy duerme en el escritorio del Ministro del Interior. A esto se suma que no sabemos que queda de nuestros aportes luego de tantas modificaciones.