Garretón dijo que pese a que el Estado chileno ha asumido una política de la “No Repetición”, que contiene ejes consagrados en instrumentos internacionales, todavía están pendientes varias medidas para garantizar los derechos de la ciudadanía. Una de ellas, recalcó, es terminar con el ente transgresor, es decir, con la institucionalidad castrense. “La única manera de que no haya repetición, es que no hayan fuerzas armadas”. “El Estado debe hacer esta propuesta y dar garantías para que desaparezcan los hechores de la última violación a los derechos humanos”, aseveró.