De acuerdo a lo leído te comunico que aún no me recupero de la sensación de asco y repugnancia que me embarga.
Ciertamente tú no pasaste por Villa Grimaldi, por Tejas Verdes, por Londres 38, por la Venda Sexy, o por algunos de los cientos de centros de tortura y desaparición de personas. Sería inútil tratar de hacerte entender que la dignidad no se transa y que las convicciones políticas no se venden.