V.A.L.G. caminaba hacia su hogar cuando percibió gases lacrimógenos en el ambiente, por lo que comenzó escapar, siendo advertida por Carabineros para que se detuviera. Ella obedeció y levantó las manos en señal de paz, señalándoles que estaba embarazada. Sin embargo, recibió inmediatamente una patada en la espalda por un policía y también declaró haber sentido un golpe en el abdomen bajo. Una situación que se agravó cuando, ya estando inmovilizada boca abajo, un carabinero puso su pie sobre su cuerpo presionándolo contra el piso.