En el comedor se les ocurrió la idea de hacer un jardín infantil para que las mujeres pudieran ir a trabajar. Viví en tiempo de Allende con un pueblo contento, con la esperanza en la transformación del país. El país había sido preparado por la democracia cristiana en su momento, durante seis años. Y sobretodo por las reformas: educacionales, de las Universidades. Y ahora se cumplía también el derecho del trabajo. Con respeto al trabajador, que por primera vez puede estar de pie, dignamente.