El gobernante actual de Perú, Pedro Pablo Kuczynsky (PPK) no tiene moral alguna para ser el anfitrión de la próxima Cumbre de la OEA en Lima en abril próximo. Más aún cuando el tema central de esta cumbre es la lucha contra la corrupción y PPK en estos mismos días evade públicamente las investigaciones cada vez más incriminatorias de sus negociados lobbystas.