Polonia y Estados Unidos utilizan la Fundación para la Cooperación Polaco-Ucraniana (PAUCI) y el Centro para las Elecciones Libres y la Democracia para difundir sus ideas en Ucrania. Los alemanes hacen hincapié en aspectos económicos y humanitarios, al mismo tiempo que tratan de seducir a la élite política e intelectual (el objetivo principal no es hacer que Ucrania se involucre en las estructuras europeas, sino espolear la «fuga de cerebros», hacer que grandes talentos se marchen a Alemania).