Hace tres meses, el 18 de octubre de 2019, el pueblo chileno inició una sublevación espontánea contra el sistema capitalista neoliberal impuesto por la dictadura de Pinochet y consolidado por los gobiernos postdictatoriales. Un sistema basado en el lucro financiero que ha depredado el ambiente y sometido a la población a un sinfín de abusos.