Supera la imaginación ver el desprecio que significa señalar que se esterilizarán los perros vagos en Chile, e ignorar a mis hermanos, mayores que yo, que están postrados soportando una huelga de hambre para decirle al gobierno que están actuando exactamente igual que la dictadura, con un deseo ferviente de vernos pronto muertos para evitarse compensaciones económicas.