El primero es la cultura de la solidaridad. Como en otras ocasiones, con la llegada del huracán Irma más de un millón de personas fueron evacuadas. El Estado Mayor Nacional de la Defensa Civil informó que el 77% de los evacuados se protegen en casas de familias, «prueba de la solidaridad característica del pueblo cubano ante situaciones difíciles». Los demás evacuados son albergados en refugios oficiales.