La guerra jurídica, que se traduce en inglés como ‘lawfare’, es definida como el «uso indebido» de «instrumentos jurídicos» con «fines de persecución política, destrucción de imagen pública e inhabilitación de un adversario político», según un texto publicado en el Centro Estratégico Latinoamericano de Geopolítica (Celag), escrito por Camila Vollenweider y Silvina Romano.