La programación de las radios chilenas, ese es otro tema fundamental, que incide en lo anterior. Pero, no es lo único. Tampoco hay productores que quieran apostar por esta “otra” música, que no es la del éxito comercial seguro, probado, evidente; y que tiene más que ver con el crecimiento espiritual que con el rubro de la entretención. Allí veo unas ausencias grave, porque los productores son los responsables de producir el contacto directo entre los artistas y su pueblo; y por lo tanto de lograr que se produzca el conocimiento, la formación, la educación.