La reacción del Banco Central de subir las tasas al 60 por ciento anual y del encaje bancario en 5 puntos es más preocupante aún que la búsqueda de secar de pesos el mercado para evitar presiones sobre la paridad cambiaria. Es más inquietante porque la propia entidad monetaria anunció que va a mantener este nivel astronómico de las tasas hasta diciembre, lo que implica que la caída de la economía va a ser todavía más pronunciada, con los consiguientes costos sociolaborales inmensos.