La autodenominada “Coalición Internacional anti-EIIL” es una organización liderada por EE.UU. y conformada por alrededor de sesenta países. Sin embargo, la realidad se ha mostrado reacia a dar un fundamento verídico a este organismo militar pues su labor ha sido preferentemente en tres campos: uno, eliminando civiles indefensos, dos, aportando armas y financiación a grupos terroristas, y tres, orientando logísticamente a las bandas que operan en Medio Oriente.