El Frente Amplio tiene la oportunidad de representar este ánimo anti-establishment. Si lo hace inyectándole contenidos de solidaridad, justicia social y regeneración social y política, podría al mismo tiempo prevenir la aparición –inminente, en mi opinión- de un populismo de derechas de carácter nativista, defensivo y excluyente, como el que vemos en las versiones de Farage, Marine Le Pen o el mismo Trump.