No hay caso, no hay manera de trabajar, nos  disparamos en el pie, día por medio. La pregunta es: ¿Cómo vamos a recuperar la  competitividad perdida? Si  paralizamos a cada rato y por los motivos más diversos.
La paralización de los cargadores, era un secreto a voces, pero claro está, pilló totalmente desprevenida a la administradora. Ahora con un  paro que ya se prolonga una  semana y amenaza con ser indefinido, nadie atina a nada y todos eluden su responsabilidad.