Hoy, 22 de abril, como todos los días del año, se seguirá liberando toneladas de dióxido de carbono, metano, butano, etc., hacia el manto sagrado (la atmósfera) de nuestra Madre Tierra. Incuantificables metros cúbicos de veneno químico se verterá al sistema sanguíneo (cuencas hídricas) de la Pachamama. Los perforados pulmones (bosques) de nuestra envejecida Madre serán rebanados como mantequilla por la moderna tecnología. Y, muchos de sus hijos/as defensores seguirán presos, perseguidos o matados por el moderno sistema del desarrollo.