Quizás, tal como aseguran los pueblos indígenas, uno podría afirmar que el futuro está en el pasado, y en este sentido el asalto naranja a La Moneda posee una fuerte carga simbólica, pues los estudiantes se tomaron La Moneda sin bombardearla ni matar a nadie, como sí lo hicieron las Fuerzas Armadas y la Derecha en 1973. Aquel fue un golpe de Estado, este fue un golpe al Estado; aquel fue un golpe de fuerza, este fue un golpe de imaginación. Aquel fue un golpe al sueño de muchos, este fue un golpe de sueños.