06 de septiembre de 2014

Cuando nuestros estudiantes piden el fin al lucro en la educación, surge la pregunta lógica: ¿Es posible que los empresarios, que han elegido la educación como área para sus negocios, renuncien al lucro y sigan trabajando como si nada hubiera pasado?
Hace ya 144 años, un cientista social dio una respuesta al respecto.