En lugar de solucionar los problemas, estas falsas soluciones solo ayudan a empeorarlos. En lugar de limitar las emisiones, han creado mercados artificiales y oportunidades para que los grandes contaminadores sigan contaminado y han hecho muy poco para reducir los efectos del trastorno climático. En defendiendo los intereses del capitalismo y privatizando la naturaleza, las multinacionales están poniendo en peligro la vida de la gente corriente, de los pequeños agricultores, de los campesinos y de las comunidades indígenas quienes asegura su sobrevivencia con la naturaleza.