Preocupación y repudio de organizaciones y referentes de los derechos humanos ocasionó el fallo de la Corte Suprema que aplica la ley del 2×1 a un condenado por delitos de lesa humanidad. El llamado a la “reconciliación” por parte de la iglesia, el beneficio de la prisión domiciliaria a Miguel Etchecolatz en una de las causas en su contra, el intento de reinstalar la teoría de los dos demonios y el negacionismo que se impulsa desde el gobierno de Cambiemos suman sombras a un panorama que se oscurece.