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Debate: ¡Chile sangra aún, 43 años después del golpe! La prensa sueca censura esta denuncia

Debate: ¡Chile sangra aún, 43 años después del golpe! La prensa sueca censura esta denuncia
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Este artículo de debate, firmado por dos chilenas residentes en Estocolmo, fue enviado a las redacciones de los principales diarios de tiraje nacional en Suecia. No fue aceptado para su publicación en ninguno de ellos. Lamentablemente, esto nos confirma que a los compromisos comerciales entre Chile y el Reino de Suecia se les adjudica mayor importancia que al supuestamente democrático “derecho a libre expresión” de dos sobrevivientes de la dictadura de Pinochet. Es por eso que divulgamos nuestro relato a los medios de comunicación alternativos.

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De izquierda a derecha: Olinda Mena, abogado Víctor Rosas (vicepresidente de la UnExPP), Vania Ramírez León. Durante la visita al Parlamento de Suecia el 21 de abril de 2016.

Del 10 al 12 de mayo de 2016 la Presidenta de Chile Michelle Bachelet realiza una visita de Estado a Suecia. A nosotras, al igual que a muchos de los chilenos residentes en Suecia nos complace esta visita, así como el diálogo entre las autoridades chilenas y suecas. Nos alegra sobre todo que la Presidenta Bachelet el 11 de mayo devele un busto del Embajador Harald Edelstam en el parlamento. Para nosotros esto simboliza nuestro agradecimiento a la sociedad sueca que en un momento de apremio nos recibió cuando huíamos de la dictadura de Pinochet, sociedad que nos otorgó un refugio seguro y la posibilidad de reanudar nuestras vidas.
En Suecia hay aproximadamente 50.000 personas de ascendencia chilena, muchos de ellos víctimas directas o indirectas de la prisión política y tortura durante la dictadura de Pinochet. Hoy levantamos nuestras voces para llamar la atención sobre temas importantes, dado que los derechos humanos son uno de los temas clave durante la visita de Estado de la Presidenta Bachelet.
Desde la transición de la dictadura a gobiernos civiles, pasaron 13 años antes de que el Estado chileno reconociera que habían otras víctimas además de los muertos/ejecutados y desaparecidos durante la dictadura. Fueron años de lucha de las víctimas sobrevivientes, sus familiares y organizaciones de derechos humanos hasta que se designaron comisiones para recibir testimonios sobre prisión política y tortura. Pero nosotras, al igual que otros, consideramos que no hemos recibido la reparación e indemnización que nos corresponde.
Olinda:

“Soy sobreviviente de una familia a la cual los esbirros de la dictadura intentaron eliminar. Mi hermana Nalvia (embarazada), su esposo, yerno y suegro forman parte de los detenidos desaparecidos. Mi hermana menor no pudo superar la desaparición de Nalvia y se dejó morir. Mi madre, hermanos, mi hijo mayor y yo experimentamos la prisión política. Yo sobreviví torturas horribles, mientras que mi esposo falleció en mis brazos (a los 41 años de edad) producto de las hemorragias internas causadas por las sesiones de tortura.”

Vania:

“Llegué a Suecia en 1976 con mis padres. Portaba traumas acumulados durante tres años de mi niñez, cuando mi familia fue acosada y perseguida, y mi padre y primos fueron encarcelados y torturados. El frágil cuerpo de mi madre no sobrevivió el trauma del exilio. Mi padre vivió con las secuelas físicas y psicológicas de la tortura hasta fallecer prematuramente producto de enfermedad cardiovascular severa (el destino de muchas víctimas de tortura). Hice entrega póstuma de la información sobre mi padre a la Comisión Valech. Su nombre con un número designado son un renglón en un informe. No hubo reparación por parte del Estado chileno; la víctima reconocida había fallecido”.

Nos indigna el hecho que la información que nosotras y muchos más entregaron a las Comisiones Valech esté clasificada como confidencial durante 50 años, lo que implica la impunidad para los que encarcelaron y torturaron a las víctimas (=nosotros y/o nuestros familiares).
Consideramos que todos los gobiernos civiles chilenos que se han sucedido, incluyendo los de la Presidenta Bachelet, han postergado sistemáticamente el tema de reparación e indemnización para las víctimas de prisión política y tortura. Todos parecen esperar que las víctimas directas envejezcan y mueran, mientras que los familiares sobrevivientes seguirán condenados a vivir con sus traumas.
La Convención de la ONU contra la Tortura y Otros Tratos o Penas Crueles, Inhumanos y Degradantes, establece que “Todo Estado Parte velará porque su legislación garantice a la víctima de un acto de tortura la reparación y el derecho a una indemnización justa y adecuada…” ¿No debería el Estado chileno estar a la altura de una Convención a la cual se ha suscrito? El Estado chileno no cumple con sus compromisos. ¿Nombrará el Gobierno sueco esta situación a la Presidenta Bachelet, además de hacerle un seguimiento posterior en el diálogo anual sobre derechos humanos entre la Unión Europea y el gobierno chileno?
-Las autoras,  Olinda Mena, enfermera, es terapeuta y Vania Ramírez León, es médico. Ambas viven en el exilio y residen en  en Estocolmo, Suecia

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5 Comentarios

  1. Serafín Rodríguez

    Lo poco de imagen que les queda a Bachelet y a su comitiva de zánganos, si es que les queda alguna, vale más que los DD.HH. para los medios suecos que se hicieron los suecos. Eldestam habría protestado al igual que Olinda y Vania –dos mujeres notables y de mayor categoría moral que Bachelet, una política rastrera al servicio de los intereses del empresariado nacional y extranjero, además de nepotista y corrupta por asociación familiar. De hecho no puede no haber sabido de los negociados de su nuerita e hijito desde que metió a éste al Ministerio de RR.EE. sin calificación ni mérito alguno. El solo nepotismo ya es una forma de corrupción. Sin embargo, se pasea por el mundo a raja suelta con su sonrisita hipócrita! Un asco que a estas alturas revuelve las tripas por su hipocresía.

  2. gfwestphal

    Con todo, no sólo hubo censura a nivel de la prensa sueca, sino que también en el parlamento sueco. La siguiente información ha sido distribuida por la Dra. Vania Remeirez, ex prisionare política y exiliada chilena en Sueca:
    La pregunta que no se le hizo a la presidenta Bachelet en el parlamento sueco
    El miércoles 11 de mayo de 2016, la presidenta Bachelet visitó el parlamento sueco. Después de una intervención, respondió a dos preguntas (bien seleccionadas) de parlamentarios suecos.
    Entre los inscritos para hacerle preguntas a la presidenta Bachelet, se encontraba Amineh Kakabaveh, parlamentaria del Partido de Izquierda. Su pregunta no pudo ser presentada, “porque el tiempo disponible era muy reducido, y muchos los parlamentarios que querían hacer preguntas”…
    Nos queda la impresión que la pregunta de Amineh Kakabaveh, entregada con mucha anticipación en sueco e inglés al presidente del parlamento sueco, era demasiado fuerte para ser presentada en público:
    En el programa de su gobierno se dice: “Adoptaremos medidas, legislativas para reconocer el derecho de las víctimas de las graves violaciones a los derechos humanos y sus familiares, a obtener reparaciones civiles del Estado. Revisaremos las actuales leyes reparatorias. Asignaremos a una entidad estatal permanente que se haga cargo del reconocimiento, acogida, asistencia jurídica, social y de reparación para las víctimas de Crímenes de la Dictadura.”
    Hemos sido informados que tanto la Cámara como el Senado aprobaron, en Proyectos de Acuerdo de abril de 2014, solicitar de Ud. les envíe un Proyecto de Ley de indemnización justa y adecuada para las víctimas de prisión política y tortura.
    La Ministra Secretaría General de la Presidencia contestó en forma negativa la petición del Senado. En abril de 2015 las víctimas iniciaron una prolongada huelga de hambre en diversas ciudades de Chile. Tomando en consideración que ese proyecto de ley se basa en lo estipulado en los tratados internacionales de derechos humanos, que Chile ha suscrito, y que significaría realmente cumplir con lo establecido principalmente por la Convención Internacional Contra la Tortura y Otros Tratos o Penas Crueles, Inhumanos y Degradantes, en su artículo 14, mi pregunta es si Ud., Presidente Bachelet, considera dar la iniciativa de ley para que las víctimas de prisión política y tortura (muchos de los cuales residen en Suecia), reciban una indemnización justa y adecuada?
    FUENTE: https://www.facebook.com/groups/ExPresosPoliticosChilenosEnExtranjero/
    Presidenta Bachelet,

  3. Luis Recabarren

    Tanta mentira Olinda Mena: Luis Rubio fallecido marido de Olinda Mena nunca fue preso o torturado .Murio victima de cirrosis despues de 2 decadas de alcolismo Nunca ha sido torturada opurtunismo politco es lo ultimo, hablando de mi madre detenida desaparecidas durante la dictadura nunca hubo una lucha. porfavor que repugnante esta gentusa que todavia usa mis padres como pretexto de sacar provecho. Creen que sacando dinero de reparacion falsas. que terrible. En los registros de DDHH se sabe la gente que lucho y no la que esta dando falsos comentaris falsas luchas. ya despues de 40 años hasta cuando esta mujer enferma sigue con sus mentira y se las da de luchadora nunca fue. Yo creci en la vicaria de la solidaridad de pequeño con la AFDD./Saludos Luis Emilio Recabarren Mena

  4. Gerson Brandenberger Valente

    Soy favorable a la busqueda de la verdad y justicia; pero es con desagrado y malestar que veo un miembro de la familia (Olinda Mena) aprovechandose de una tragedia familiar (Nalvia Mena detenida desaparecida) para benaficiarse mas una vez ( reparacion monetaria) atraves de mentiras y farsas como las publicadas en esta materia por ella : Su fallecido marido (Luis Rubio) murio victima de alcolismo. Nunca fue preso politico ni torturado. Muchos pueden creerle su testimonio de tortura pero sus familiares saben que es mentira.

  5. José Maria Vega Fernandez

    Claro. No sólo las divas y rockeros vienen a Chile para embolsar sus bolsillos con cobredólares. Para los extranjeros, «estamos forrados», todavía.
    Y Suecia….bueno, que puedo decir: Cuando la CIA opera contra Chile -el Ogro- , alguien busca algún país europeo para que luego de la masacre pase la mano acariciante y protectora.
    Detrás de los tanques pasa la Cruz Roja.

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